Chiemgauer

A partir de la izquierda: Anna, Franziska, Theresa, Cathrin, Charlotte y Mirjam

“Chiemgauer: ¿una moneda para las Escuelas Waldorf?”
Christian Gelleri, Jaqui Dunne, Bernard Lietaer, Chiemgauer for Waldorf Schools.pdf (12 de marzo 2004)

Este experimento con monedas complementarias ya está a llamar la atención de decenas de otras comunidades en Europa y más allá de sus fronteras. Esta es una aplicación de la conclusión de que “el dinero no es una cosa, aunque aparece como un objeto (papel, oro, plata, monedas). El dinero es más bien un acuerdo dentro de una comunidad para usar algo como un medio de intercambio. Por lo tanto, el dinero reside en el mismo espacio que todos los contratos sociales, tales como el matrimonio, los contratos de alquiler y los partidos políticos…”1 Así que ¿por qué no crear un acuerdo de dinero coherente con la filosofía de Rudolf Steiner y que de soporte a las escuelas que llevan su nombre?

http://www.chiemgauer.info/


Arrinconado en la emprendedora región high-tech alemana de la Baviera, en la próspera y bulliciosa zona de Chiemgau, está en marcha un experimento que no sólo da soporte al sistema local de enseñanza Waldorf, sino que también alienta el apoyo a los negocios locales. Seis jóvenes, todas adolescentes y alumnas de la escuela Steiner, han comenzado una empresa usando un nuevo tipo de dinero.

Este experimento incipiente está ya llamando la atención de decenas de otras comunidades alrededor de Europa y más allá de sus fronteras.

Minoristas locales de Chiemgau, como es habitual en otras ciudades y pueblos del mundo, están sintiendo la presión de la actual recesión económica. Chiemgau también es escenario de la clásica competencia entre las antiguas tiendas tradicionales ofreciendo productos regionales locales o bienes de mayor calidad y el precio ofrecido por las grandes cadenas minoristas. Minoristas locales también están sintiendo, naturalmente, la dificultad en competir con los grandes comerciantes, nacionales e internacionales en base al precio y están perdiendo cuota de mercado crítica, viéndose algunos obligados a dejar el negocio por completo.

Así, inspiradas por su profesor de economía, Christian Gelleri, de 30 años, estas seis jóvenes crearon un sistema de dinero que alienta a los usuarios a realizar sus compras a nivel local gracias a un mecanismo integrado que hace posible apoyar financieramente a organizaciones benéficas y causas sociales a elegir por los usuarios, tales como el sistema local de enseñanza Waldorf. Esta es una aplicación de la conclusión de que “el dinero no es una cosa, aunque aparece como un objeto (papel, oro, plata, monedas). El dinero es más bien un acuerdo dentro de una comunidad para usar algo como medio de intercambio. Consecuentemente, el dinero vive en el mismo espacio que todos los contratos sociales, tales como el matrimonio, los acuerdos de renta y los partidos políticos.” [1]

Así que ¿por qué no crear un acuerdo de dinero que sería coherente con la filosofía de Rudolf Steiner y apoye a las escuelas Steiner?

¿Cómo funciona el Chiemgauer?

Quienes deseen participar en el Chiemgauer, compran 100 Chiemgauer por 100 Euros. Esta moneda sirve para pagar bienes y servicios en tiendas adherentes. El balance final de los negocios de la jornada es que el 95 por ciento se lo queda la empresa, el tres por ciento va a las causas sin ánimo de lucro (por ejemplo, para el nuevo edificio de la escuela Waldorf en Chiemgau) y el dos por ciento restante va a la administración de moneda Chiemgauer para cubrir gastos.

Hay una característica adicional de la moneda Chiemgauer que la diferencia de la moneda convencional. El Chiemgauer lleva un sello de tiempo y se le aplica una “tasa de oxidación” por no hacer circular el dinero. Esto da un incentivo al usuario para gastar la moneda local en lugar de acumularla o guardarla. Esta función garantiza que la moneda se mantiene en circulación, lo que a su vez es bueno para los negocios en particular y para la región en general.

Rudolf Steiner habló sobre el concepto de “dinero perecedero” en Aspectos Fundamentales de la Cuestión Social [1919] (escribe en la página 119 [de la edición inglesa]): “a fin de evitar que el dinero permanezca inactivo, un nuevo problema podría tener lugar de vez en cuando. Uno de los resultados de tales medidas es que el interés derivado de capital disminuiría en el transcurso del tiempo”. La idea de “dinero perecedero” o con fecha de caducidad tiene, de hecho, miles de años. Hubo varios períodos a lo largo de la historia, incluyendo el Egipto dinástico y el medioevo central del Norte de Europa – en los que el estacionario (dinero de interés negativo) o dinero perecedero fue utilizado. Contrariamente a una idea popular equivocada, estas sociedades disfrutan de gran vitalidad económica como lo demuestra la construcción de las grandes pirámides y de las mayores catedrales. En particular, fue la gente común y no de la iglesia, durante los siglos X y XII, la que disponía de fondos discrecionales adicionales como resultado de la su sistema dinerario y que tuvo la capacidad de financiar estas obras públicas de gran envergadura.

Varios siglos más tarde, Steiner no sólo visó la eficiencia en el intercambio de bienes y servicios, él también señaló que necesitábamos una visión más holística del dinero. En consecuencia, dado que sería la clave para la innovación espiritual y social, especialmente para las iniciativas de educación y otras que benefician a la sociedad y necesitan ser apoyadas. El Chiemauer se ajusta a la aspiración de Steiner.

La idea de un sistema de moneda complementaria ha ido germinando desde hace muchos años, motivada por los ejemplos de la WIR, en Suiza, y el sistema de Euro de Bethel en Alemania actualmente operativo y el famoso y exitoso experimento de Worgl en Austria durante la década de 1930, que fue prohibida por las autoridades austríacas de 1933 (administración del distrito de Kufstein, decisión confirmada por la Corte Suprema de Administración).

Pero las seis alumnas fueron las que dijeron: ¿por qué los adultos hablan y piensan durante tanto tiempo? La idea suena bien. ¡Vamos a ponerla en práctica!

Girl Power


Cada una de las jóvenes tiene distintos talentos y es muy interesante que después de un año yo pueda afirmar: la funciones elegidas encajan perfectamente con sus antecedentes, habilidades e intereses”.

Mirjam, 17 años de edad, es quien dirige y coordina las demás trabajadoras de la asociación. Sus padres están tan interesados en cuestiones sociales como ella. Aunque introvertida, ella es la que primero captó realmente la idea de la moneda local. Anna, 16 años de edad, es la diseñadora de los vales. Su padre es un artista, y su madre es profesora. Ella disfruta realmente del arte y tiene un sensibilidad muy refinada para las artes gráficas. Diseñó el logotipo y a menudo pinta grandes logos y señalizaciones para el sistema y sus comerciantes con notable estilo artístico. Cathrin (16) escribe todos los materiales de marketing. Su madre es una artista y su padre, profesor de ingeniería. Las Relaciones Públicas las llevan Charlotte (16) y Christian. Charlotte tiene mucha seguridad en sí misma y moderó nuestra primera Conferencia regional de dinero para dar inicio al sistema. Es la más joven en el equipo y la más extrovertida. Su padre es médico; su madre está activa en las AMPA (asociaciones de madres y padres de alumnos) locales.

Teresa (17) es responsable de producción de vales y materiales adicionales para la organización. Ella trabaja muy duro y dedica horas extra si es necesario. Contribuyó con dos dibujos de la parte trasera de los vales de Chiemgaur. También trabaja en un proyecto de alimentación de energía solar en la escuela. Con su profesor Herbert Langmann construyeron con éxito una instalación solar en el tejado del edificio de la escuela y en la siguiente fase, con el apoyo de la Alcaldía, planean expandirlo convirtiéndolo en el techo solar más grande de la ciudad. Sus padres son agricultores. Y finalmente, Franziska (17) se encarga de los libros. Ella es muy rigurosa y utiliza de forma muy racional los recursos de la asociación. Su padre trabaja para una gran empresa de telecomunicaciones y también participa en la fase de desarrollo del proyecto.

Por lo tanto, en su mayor parte fue trabajo de las jóvenes la venta del proyecto a los comerciantes locales. Y ¿quién mejor que los alumnos en la escuela para beneficiarse de la vertiente de financiación de este esquema de participación social?

Lanzamiento del Chiemgauer


El mayor esfuerzo para la puesta en marcha fue convencer a las empresas a participar. ¿Escuchamos preguntas como: ¿por qué deberíamos dar 5% de nuestro volumen de negocios? ¿Por qué debemos aceptar dinero que “sólo” es válido en la región y tiene una cuota de estadía? En los primeros días algunos especularon que nadie participaría.

También llevó su tiempo pensar acerca de los aspectos relativos a la seguridad de los cupones, algo que es un factor importante para obtener la confianza tanto de los comerciantes como de los participantes al utilizar el sistema. Por eso los estándares de impresión de los vales son muy elevados, por lo que es difícil, si no imposible, falsificarlos. Además, teniéndolo en vista y junto al hecho de que la mayoría de la gente se conoce, la falsificación es impensable. También hay una tarjeta del club que identifica a los miembros de la asociación. Todo el mundo que quiera participar debe firmar las normas de la nueva moneda. No hay ninguna cuota de afiliación. Además, no hay ningún mecanismo de seguimiento tipo ‘Gran Hermano’, por lo que nadie sabe cuándo, qué o cuánto compran los participantes con sus Chiemgauers.

Tras dos meses de conversaciones y llamadas telefónicas de seguimiento, cerca de 35 empresas estaban dispuestas a participar. El sistema fue lanzado oficialmente en enero de 2003. Los clientes pueden comprar casi todo con sus monedas complementarias. Alimentos, ropa, medicina, mobiliario, servicios. Un cliente relata su experiencia con el Chiemgauer: “al principio yo estaba escéptico sobre si funcionaría. ¿Aceptarán mis Chiemgauers? La segunda vez todavía me entró un poquito de vergüenza pero la tercera vez me sentí muy seguro y la verdad es que es muy divertido gastar los Chiemgauers. Cuando al principio los sacaba de mi bolsillo, otros clientes miraban a menudo sorprendidos y preguntaban. Yo siempre he dicho que su función sería apoyar a nuestra escuela. Recientemente un turista de Berlín me explicó que el Chiemgauer ampliaría los círculos regionales. ¡Muy listo!”

El modelo es muy exitoso: después de 100 días el “club Chiemgauer” cuenta con 100 miembros. Se emitieron 10.000 Chiemgauers. 70 empresas aceptan ahora Chiemgauer. Hay al menos un nuevo negocio y dos nuevos clientes cada semana. También hay límites. De momento los mayoristas sólo aceptan Chiemgauer en pequeñas cantidades porque el sistema no está totalmente informatizado y la transferencia electrónica de Chiemgauer todavía no es una opción. Lamentablemente, en este momento, los estudiantes no son capaces de programar software nuevo. Sin embargo, hay mucho apoyo para el proyecto y se espera que el software de transacciones esté disponible a finales del año. Se espera también que puedan asociarse a un banco de la región comprometido con la comunidad para que este sistema pueda ser equipado con lectores de doble moneda para comerciantes adherentes y proveedores.

La organización planea contratar tres estudiantes más para hacer frente a la carga de trabajo. Por supuesto los 1.000 Euros (US$ 1100) en los primeros dos meses de operación no es suficiente para pagar a más maestros o construir ya una nueva escuela. Pero es pronto todavía, y claramente el comienzo es muy prometedor.

Además, el dinero es sólo una de las dimensiones relevantes. Todos los miembros indican que al usar sus Chiemgauers experimentan un fuerte sentimiento de pertenencia a la comunidad local y que estan contribuyendo a su bienestar socioeconómico. Gracias al éxito del Chiemgauer y del proyecto solar, esta nueva forma de enseñanza se está tomando más en serio en la escuela: aprender haciendo. Todo el mundo conoce los proyectos y las personas que están involucradas han aprendido valuosas lecciones de vida. Estudiantes y docentes han aprendido a crear una visión y pasar a la acción, paso a paso, haciéndolo real.

La fotografía de conjunto


En realidad, el Chiemgauer es sólo un ejemplo de un movimiento mundial hacia monedas complementarias, socialmente motivadas.

El gráfico siguiente da una idea de las dimensiones de este fenómeno.

Número de sistemas monetarios complementarios en 14 países (1984-2003).

Este tipo de sistemas persigue una gran variedad de fines sociales, desde soluciones para el desempleo local hasta el cuidado de los ancianos, de la tutoría de niños a la resolución de problemas ambientales.[2] Lo que estas monedas tienen en común es su capacidad de operar en paralelo con el sistema convencional de dinero y poder satisfacer necesidades que de otro modo no lo serían con recursos no utilizados [ociosos].

Lo que hace diferente al Chiemgauer es que también genera un flujo de efectivo en dinero convencional que puede ser destinado a fines específicos, en este caso la escuela local de Steiner. También es uno de los pocos sistemas que tiene formalmente incorporada la “tarifa de aparcamiento” [u oxidación]. Por último, se trata de una moneda que integra en su núcleo una dimensión de donación, tal como Rudolf Steiner y el movimiento antroposófico siempre reclamó.

¿Qué relevancia para las Escuelas Waldorf?


La gran mayoría de las escuelas Waldorf, como la mayoría de instituciones educativas, está buscando permanentemente financiación adicional. El modelo Chiemgauer, aunque no es una panacea, claramente puede ayudar en este dominio. Además, es una aplicación práctica en el mundo real de la filosofía de Rudolf Steiner, una herramienta adicional de enseñanza para estudiantes y profesores y una manera de hacer más visible la red de escuelas Waldorf en círculos que de lo contrario podrían no haber oído nunca hablar de ellas.

Incluso sería posible para los diferentes sistemas locales interconectar a un nivel más amplio, nacional o incluso internacional, y está actualmente en beta un software especial de cámara de compensación que estará disponible como software gratuito de código abierto para cualquier grupo interesado en utilizarlo.

Si hay otras escuelas interesadas en aplicar el modelo Chiemgauer, estarán disponibles a través de la Access Foundation paquetes de información, software y asesoramiento sobre cómo implementar un sistema de este tipo, o incluso sobre cómo diseñar otra moneda específica para tu región y tus necesidades.

[1] B. Lietaer. Access to Money beyond Greed and Scarcity (Access Foundation, octubre 2003).

[2] Un inventario completo aparece en un libro reciente: B. Lietaer and S. Belgin: Access to money without greed and scarcity. (Access Foundation: octubre 2003). 

Fuente: Open Economy.

Traducción: Francisco Serra Lopes

Más información:

Monedas alternativas y divisas complementarias http://www.trimembracion.org/essays/2003-04-001.html

Moneda con oxidación y democrática http://www.taringa.net/posts/economia-negocios/9388301/Los-Chiemgauer_-moneda-con-oxidacion-y-democratica.html

http://p2pfoundation.net/Chiemgauer

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Acerca de teorificios

Mi nombre es Francisco. Vivo en Barcelona. Me gusta pensar acerca de distintos lenguajes y compartirlos de forma crítica, tanto desde la escrita como de la acción política. Aquí escribo sobre cosas que nos unen y singularidades que me interesan. Te invito a leer y comentar, y también puedo escucharte como psicoanalista. Si lo deseas, escríbeme: [email protected]

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